Es increíble ver como los bebés suelen ser una mezcla de los padres. En muchas ocasiones cuesta saber a quién de los dos se parece más, incluso a veces parecen verdaderos clones, aunque es cierto que según van creciendo, unos días se parecen a la mamá, otros días al papá y otros a ninguno de los dos.
Asier es una mezcla total de sus padres, pero lo que más nos sorprendió, fue ver su expresión cuando arruga la frente, ¡¡es igualita a la de su padre!!
Oscar - Que razón. Simplemente es así!!!
Guapíiiisiimo!!!!!
Un abrazo.